Este domingo por la tarde en el Pancho Fiori (Elortondo) se jugó la segunda final en la élite de la Liga Venadense de Fútbol. Allí, Atlético no dejó escapar la oportunidad y dio la vuelta olímpica en su casa.
Era la tercera final de manera consecutiva que jugaba Atlético Elortondo con muchos protagonistas similares, que venían luchando por la corona y no se les daba. En esa lucha y perseverancia, el equipo de Hernán Ferri le dio valor al dicho, y la tercera fue la vencida. Le ganó a Hughes por 1 a 0, y se coronó campeón de la Liga Venadense de Fútbol.
En cuanto a lo que dejó la segunda final hay que decir que hubo dos polémicas en la primera parte. Dos penales no sancionados por Alejandro Scionti. Uno por bando. A favor del árbitro fueron jugadas muy rápidas.
En el desarrollo, el partido fue muy parejo y trabado, propio de estas instancias decisivas, donde se mete más de lo que juega y se vuelven cruces de mucha tensión, por momentos pocos vistosos para los espectadores.
En esa lógica, el que hacía el gol era el campeón. Y así fue. A los 24 minutos del segundo tiempo, Atlético Elortondo dio el golpe en una jugada un poco extraña. A la salida de un lateral, la defensa visitante no la pudo rechazar, Nicolás Echegaray no dudó y se la cruzó al firmatense Nacho Aramburu, que nada pudo hacer para evitar la caída de su arco.
Los minutos pasaron. Hughes sintió el golpe. Atlético manejó el juego a su favor, llegó el pitazo final y se desató la euforia del pueblo azulgrana. Lágrimas, abrazos, desahogo, felicidad, el club elortondense volvió a gritar campeón después de 60 años (la última vez había sido en 1964) y los festejos seguramente se estirarán por largas horas (y días).
Por su parte, hay que destacar la notable tarea de Hughes, que llegó a la final terminando en la quinta ubicación de la fase regular, evidenciando el potencial de su cantera acompañada por la jerarquía de Scocco y la experiencia de jugadores como Rotondo y el arquero firmatense Aramburu.
Por Franco Camiscia