El sur-sur de Santa Fe vive el fútbol de una manera muy especial y pasional. Todos los domingos, en cada una de las ligas de la región, la euforia y el sentido de pertenencia por los clubes de pueblo y ciudades pequeñas se realza en abrazos de gol que se plasman de igual manera tanto adentro como afuera de la cancha.
También se vive de un modo particular, cuando alguno de los suyos, alguno de esos pibes que anduvieron dando vueltas por esta parte del suelo santafesino tiene oportunidades únicas e inolvidables.
Más aún cuando tiene que afrontar algún partido especial o ante un equipo de los grandes de nuestro país. Sin ir más lejos, el sábado que paso, Ian Glavinovich, ya afianzado en la primera de Newell’s con solo 22 años, jugó contra Boca Juniors por la Copa de la Liga Profesional y todo Elortondo estuvo atento a lo que ocurrió en el Coloso del Parque de Independencia.
Lo mismo que este martes, cuando Julián Bonetto (29 años), actualmente en Sportivo Trinidense de Paraguay, llegó a la Bombonera para enfrentar al Xeneize por la Copa Sudamericana. En Hughes y Firmat solo importaba una cosa: que entre un ratito Julián.
Pero hay algo más que ocurre en este tipo de casos, hay algo más que es necesario poner en valor, hay algo que hace que el resultado se vuelva totalmente anecdótico.
Cuando chicos como Ian y Julián llevan la bandera de nuestros clubes, de nuestra región, a lugares impensados en el mundo de fútbol, se grita como un gol, con el pecho inflado, con la emoción y orgullo de vivirlo como propio sin importar números y colores.
Ambos ya habían jugado ante Boca
En el caso de Julián Bonetto, había jugado ante Boca Juniors por la Copa Argentina. Fue el 28 de septiembre de 2022 en Mendoza, cuando el futbolista surgido de la cantera de Firmat Foot Ball Club jugaba en Quilmes. Inclusive le marcó un gol. Fue 3 a 2 para el Xeneize por los cuartos de final de la Copa.
Hoy, Julián estuvo en el banco (no ingreso) en lo que fue derrota de Trinidense por 1 a 0 ante Boca Juniors en el marco de la segunda fecha del Grupo D de la Copa Sudamericana.
Por su parte, Ian Glavinovich, formado en las inferiores de Peñarol de Elortondo, es la segunda vez que juega ante el Xeneize. Había jugado en la Bombonera el pasado 12 de noviembre de 2022 por la Copa de la Liga. Fue derrota de la Lepra por 1 a 0.
El sábado, volvió a enfrentar al elenco xeneize, quien se quedó nuevamente con la victoria. En esta ocasión por 3 a 1 en Rosario.
Por Manuel Carreras
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