Ninguno sabe bien cómo y cuándo empezó. Pero sucedió. Quizás, un videoclip para darle movimiento a las redes sociales fue el disparador. Músicos jóvenes, con inquietudes similares, confluyeron en un proyecto artístico con raíz en Firmat. Curiosamente, en los ensayos predominaba música internacional de los años 80, cuando la mayoría no había nacido. Sin embargo, todos se subieron al mismo colectivo y el viaje musical fue directo, no hubo escalas, el destino final fue el corazón de los nostálgicos.
Desde 2023, Jit’s comenzó acaparar la atención de quienes asistieron a eventos locales y de la región, con reversiones de clásicos ochentosos que emocionan a quienes vivieron aquellos años e invitan a los más jóvenes a buscar canciones y artistas para sumar a sus playlists.

“Hay mucho material que viene de la casa de nuestros padres, incluso, en mi caso, como amigo de alguno de los chicos cuando éramos adolescentes nos juntábamos, y algunas bandas las conocí en sus casas”, comentó Lucio Pellegrini, uno de los guitarristas de la banda.
“Creo que a todos nos pasa eso, cuando vamos a la casa de algún amigo empezamos a absorber algunas costumbres, algunas canciones, algunas formas de ver algunas cosas de su entorno, así que eso enriquece la experiencia de los seis”, resaltó.
Cabe destacar que el novedoso proyecto musical está encabezado por cuatro músicos firmatenses: el cantante a Bernardo Sastre (26 años), Simón Mansilla (30 años) y Lucio Pellegrini (30 años) en las guitarras y Bruno Cacciagioni (31 años) en la batería. Completan el cuadro Agustín Oyola (32 años, de Colón, Bs. As.) en el teclado, y Fernando Fabbro (46 años, de Canals, Córdoba) en el bajo.
“Traemos la música de rincones de nuestras casas, de algún conocido, de alguna radio, de alguna fiesta, de algo que se acerca a la oreja y esa necesidad de siempre buscar de quién es, quién toca tal instrumento, cómo se grabó, la música viene de muchos lugares”, manifestó.
Conexión ochentosa
La banda, que cuenta con cinco de seis integrantes nacidos en los 90, sostienen que la semilla no solo se plantó en sus hogares, sino también hay lazos entre ellos mismos, que alimentaron y les dieron forma a sus actuales gustos musicales.
“Si bien todos tenemos diferentes influencias y escuchamos muchas cosas distintas, en un punto nos conectamos en la música de los 80, y por algo fortuito empezó a ganar terreno y terminamos pensando en continuar con esa idea”, comentó Lucio Pellegrini, uno de los guitarristas de la banda.

“No es que vimos un terreno que no estaba explorado o la necesidad de ponerlo en valor, porque consideramos que la música de la década de los 80’ es tan importante que no necesita de nadie para ponerla en valor”, reflexionó Lucio, en comunicación con El Correo.
“Ya tiene su valor propio, haya bandas que la difundan o no, ya se ganó un lugar para siempre en la historia de la música, como una de las décadas más importantes”, sostuvo Pellegrini, y expresó: “Nosotros somos una banda más, que admira lo que pasó en esa época”.

Apto para todo público
En la continuidad de la conversación, haciendo hincapié en la recepción del público en cuanto a sus shows, el músico firmatense comentó: “La relación del público para con la banda es muy linda, siempre por ahí nos dejan palabras de mucho cariño”.
“Con la gente que tiene nuestra edad o es más chica, nos pasa que les encantan los temas porque los temas ya de por sí son buenos y siempre están como en el inconsciente colectivo, están, suenan en la radio o en alguna plataforma”, sostuvo Lucio, y remarcó: “Si nos pasa con la gente que tiene nuestra edad, como te decía, que se identifica más con bandas como los Guns N’ Roses, Aerosmith, que por ahí persistieron”.

“Mientras que con la gente que tiene una edad mayor a nuestra, como que es de la franja etaria, que era la época en que se pasaban las canciones que hacemos en los boliches, tenemos una relación de: ´che, cómo me hicieron acordar cuando salía’, o cómo conoció a una pareja, o lugares, espacios que frecuentaban, también a sus épocas de estudiantes, interactuamos desde ese lugar”, comentó, y agregó: “Es como que rememoran cosas que vivieron, que siempre son experiencias lindas”.
Impronta propia
En relación a sus presentaciones, Pellegrini destacó la importancia de saber interpretar el público al cual se van a dirigir. “El armado de los shows surge de cada show, porque previamente uno sabe para quién va a tocar, el lugar, qué edad tienen, entonces eso nos modifica el repertorio. Por ejemplo, si vamos a hacer algo más pesado o algo más lento de los 80”, explicó a El Correo.
Por otra parte, en cuanto al enfoque artístico, Lucio planteó: “Es un principio cuando arrancó la banda buscábamos ser fieles al original porque necesitamos algo de qué agarrarnos, una guía y ahora que la banda va resistiendo el paso del tiempo estamos tratando de buscarle una vuelta de tuerca, con nuestra propia impronta o de intentar hacer nuestra versión de versiones que escuchamos que nos gustaron más que la original, quizás”.
El futuro enfocado al pasado
Contra la corriente, el futuro de Jits pone el foco en el pasado. Quizás retroceda aún más, o tenga la posibilidad de sumar unos años. Así lo manifestó Lucio, quien no descartó la posibilidad de ir a los 70 o a los 90.
“Nos ha pasado en el comienzo de coquetear con algún tema que era del 78, 79 y entraba justo, o de que era del 89, principio de los 90, que quizá los ejecutamos en vivo en algún show y nos dimos cuenta después, que ya estaban entrando o saliendo de los 80, pero que valían la pena ser interpretados, porque entran en esa misma etapa de la música”, contó a El Correo.
A su vez, en relación al futuro, el guitarrista de Jits manifestó: “Nosotros lo que queremos ahora es perfeccionar nuestra labor individual, después como banda y después mejorar también lo que es los shows, buscando quizás que se puedan abrir más puertas”, y cerró: “Queremos salir a tocar más y difundir la música que hacemos, que es lo más nos gusta”.

Por Manuel Carreras