A los 17 años, Valeria Fiore Cáceres dejó su querida Firmat para estudiar Derecho en la Universidad de Belgrano (CABA). Aquella decisión marcó el inicio de una carrera dedicada a la justicia, los derechos humanos y la construcción de espacios de diálogo.

Hoy, varias décadas después, su nombre vuelve a resonar en su ciudad natal: acaba de asumir como ministra del Superior Tribunal de Justicia de Misiones, el máximo órgano judicial de esa provincia.

“Firmat siempre será mi punto de partida emocional”, cuenta Valeria y remarca: “Ahí aprendí el valor de la palabra, del trabajo y de la cercanía entre las personas. Esa esencia me acompaña siempre”.

Radicada en Misiones desde hace casi 30 años, Fiore Cáceres se consolidó como abogada y mediadora con trayectoria en el ámbito público y privado. Su carrera ha estado marcada por un fuerte compromiso con los derechos humanos, la justicia accesible y los métodos colaborativos de resolución de conflictos.

Fue Defensora del Pueblo de la Ciudad de Posadas y Delegada Decanal en la Universidad Católica de Santa Fe. También se desempeñó como Directora de Métodos Participativos y Fortalecimiento Ciudadano en la Municipalidad de Posadas, impulsando programas de participación comunitaria y mediación vecinal.

En el ámbito académico, actualmente cursa una Maestría en Ciencias del Comportamiento en la Universidad de San Andrés, y dicta clases en universidades de Argentina, Paraguay y Uruguay sobre mediación, negociación y gestión colaborativa de conflictos. Publicó tres libros sobre mediación comunitaria y fue columnista dominical del diario Primera Edición de Misiones durante dos décadas.

Además, participa activamente en redes nacionales e internacionales como Women’s Democracy Network, la Red Federal de Mediadoras con Perspectiva de Género y la Fundación Mediadores en Red, promoviendo el liderazgo femenino y el enfoque restaurativo en la justicia.

Su designación en el Superior Tribunal de Justicia de Misiones en octubre de 2025 representa la continuidad natural de una trayectoria que articula gestión pública, docencia universitaria y compromiso ético.

“Trabajo con tres premisas: cercanía, integridad y perspectiva humana”, afirma. “Creo en una justicia que escuche, que comprenda contextos y que actúe con empatía sin perder la firmeza e independencia que la función exige”.

Para ella, el desafío de la Justicia en el siglo XXI pasa por combinar innovación tecnológica con sensibilidad social. “El desafío que tenemos por delante es integrar y sumar tecnología sin perder humanidad”, sostiene.

Y agrega: “La justicia para el ciudadano tiene que ser accesible, cercana, transparente y eficiente. La Justicia debe ser imparcial, pero no ciega a la realidad del ciudadano”.

Aunque su carrera se haya desarrollado lejos de su ciudad natal, Valeria conserva intacto el vínculo afectivo con Firmat. “Cada logro tiene un pedacito de esa ciudad donde aprendí a mirar el mundo con empatía y compromiso”, dice con emoción.

Su historia es la de muchas personas que partieron buscando un futuro profesional y regresan —aunque sea simbólicamente— con la certeza de que todo comenzó en ese lugar donde el tiempo se mide por afectos y memorias.

Redacción/Fuente: El Correo
(Cooperativa de Trabajo desde 2017)

Abrir mas artículos relacionados
Abrir mas en  Interes general
Comments are closed.

Ver tambien

Argentino, en busca del pasaporte a cuartos ante Carreras Athletic

Este jueves por la noche comenzarán los pre-cuartos de final. Esta instancia se jugará a p…