El ex presidente comunal de Melincué, Silvio Garbolino, utilizó su cuenta personal de Facebook para dar su mirada respecto a los hechos que sucedieron desde que decidió renunciar al cargo para el que fue reelecto de manera mayoritaria por los vecinos de su localidad.
En el mensaje, Garbolino manifestó que teme “al Poder Político” y “lo temo muchísimo por mis hijos”, remarcó. Además dijo que resulta llamativo que la mayoría de las personas que hoy están en el gobierno y dicen que “hay que investigar a la gestión anterior” fueron parte de su gobierno y estaban al tanto de las decisiones.
“En la gestión pasada, con aciertos y errores, todos sabíamos todo, porque todo se hablaba”, indicó el gobernante en su posteo y se preguntó de qué irregularidades lo acusan, de “haber dado trabajo a cada uno que necesitó sin distinción de quién era”, “de estar siempre al lado de cada institución”, “de poner el plato de comida en la mesa del que más necesitó”.
En su publicación, Silvio Garbolino pone en escena un tema que hace años divide las aguas en la localidad y sobretodo con quienes dirigen el actual gobierno provincial, quienes tienen la férrea convicción de crear una Unidad Penitenciaria a pocos kilómetros del pueblo.
El ex mandatario manifestó que “capáz” la mayor “irregularidad” que cometió fue oponerse a la cárcel. En este marco, aseguró que está dispuesto a que lo investiguen porque “jamás” se llevó “un centavo” de la Comuna.
“Fui víctima de estas difamaciones e inventos que sólo quieren confundir y solo lograron herir y lastimar lo más preciado que tengo: mi familia”, remarcó Garbolino, el cual aseguró que por esta situación perdió el “auto”, el “trabajo” y “la paz”.
Finalmente, señaló que está “apegado a Dios, el único que tiene la verdadera justicia divina, ya mi duda es saber qué plantaron en mí contra en estos 5 meses”.
“Me voy diciéndoles que voy a volver, quizás eso también les altere los nervios y por eso solo saben agredirme o atacarme”, concluyó Garbolino.
Por Mariano Carreras
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