Hablando con Julián y con Juan en los tiempos de pausa de sus sentadillas, llegamos a la conclusión de que estaría bueno escribir una nota sobre algunas lesiones deportivas.
Para ello, comienzo haciendo una introducción casi catártica de que en el mundo del deporte, no importa el nivel de juego o de la clase de deportista que se sean, la línea entre el éxito y el infortunio es, a menudo, delgada.
Las lesiones deportivas son compañeras constantes en este viaje, afectando a atletas de todos los niveles.
Hay que entender que la “nueva normalidad” del deporte, impulsada por la televisación y la comercialización (ganas de juntar dinero), lleva a los deportitas a enfrentarse a una intensidad competitiva sin precedentes. Donde antes un partido semanal era la norma, ahora se juegan dos o tres. Esta carga adicional puede aumentar el riesgo de lesiones debido a la fatiga acumulada y la falta de tiempo para una recuperación adecuada.
Pero no solo se debe a la competencia continua, ya que otros factores también contribuyen a la epidemia de lesiones deportivas en los últimos tiempos: los cambios en la alimentación, con una mayor dependencia de alimentos procesados y una dieta desequilibrada, pueden afectar la salud general y la capacidad de recuperación de los atletas; las horas de sueño de mala calidad y la falta de preparación física adecuada también se suman al problema.
El sobreentrenamiento es otro factor que no debe pasarse por alto. Los atletas a menudo buscan mejorar su rendimiento, pero un entrenamiento excesivo y una falta de descanso pueden aumentar el riesgo de lesiones. El cuerpo necesita tiempo para recuperarse y adaptarse al estrés del entrenamiento, y el sobreentrenamiento puede llevar a la fatiga crónica y lesiones musculares y articulares.
Tipos de Lesiones Deportivas y ejemplos de Deportes Asociados: 1. Esguinces y distensiones musculares: estas lesiones afectan a ligamentos y músculos, y son comunes en deportes como el fútbol, el básquet y la gimnasia artística.
2. Tendinitis: la inflamación de los tendones es un desafío para deportistas como los levantadores de pesas y tenistas, quienes exigen mucho a sus articulaciones.
3. Lesiones del LCA (ligamento cruzado anterior): ampliamente reconocidas en deportes que involucran cambios de dirección rápida, como el fútbol y el rugby, estas lesiones pueden poner en peligro la carrera de un atleta.
4. Ruptura del tendón de Aquiles: este traumatismo, aunque menos común, puede impactar a atletas en deportes de alto impacto como el básquet, vóley y pádel, causando una recuperación prolongada.
El proceso de recuperación de una lesión deportiva es una combinación de arte y ciencia. Los médicos profesionales y los kinesiólogos desempeñan un papel fundamental al ofrecer terapias basadas en evidencia y rehabilitación personalizada. En muchos casos, el recurso de una cirugía es una opción necesaria para restaurar la función “normal” de la parte del cuerpo afectada. Los avances en biomecánica, fisiología deportiva y entrenamiento impulsan, antes que nada, a la prevención y luego al tratamiento de lesiones.
En los próximos artículos, voy a tratar de entrar más en detalle en lesiones deportivas. Médicos y kinesiologos van a compartir sus conocimientos sobre la prevención, el tratamiento y las estrategias de recuperación más avanzadas. Estas conversaciones nos van a enseñar sobre cómo los deportistas pueden navegar con éxito en la “nueva normalidad” del deporte.
Por Juan Andrés García
(Profesor Nacional de Educación Física)